La elección de Jair Bolsonaro en Brasil llegó a remover el ambiente en ese país.
Con todo y específicamente la Bolsa de Comercio de Brasil cayó más de 2%, el pasado lunes, tras alcanzar un récord intradía al inicio de la sesión por tomas de ganancias de inversionistas a la espera de definiciones del gobierno del nuevo presidente electo y arrastrada por una fuerte baja de Wall Street.
En concreto el Ibovespa perdió 2.24%, a 83,796.71 puntos, tras una escalada de 3.1% en las primeras operaciones que llevó al índice a un récord de 88,279.26 puntos.
Pero, ¿Qué pasará con la bolsa brasileña en los próximos meses?
Según algunos expertos del mercado, con la elección del nuevo presidente, la confianza de los consumidores debería atraer más inversión y negocios que generarán un impulso más rápido para el crecimiento económico.
Bajo este escenario, afirman que el índice debería subir y recuperarse, en línea con su promedio histórico, superando un 20% de su nivel actual, esto considerando si se aprueba una reforma de pensiones.
Sin embargo, Arturo Curtze, Analista Senior de nuestra Consultora estima que si bien es correcto indicar que el mercado de renta variable brasilero se encuentra tranzado bajo su promedio histórico (últimos 10 años), también lo estarían haciendo el mercado de renta variable local, el norteamericano y el europeo (por nombrar algunos).
Bajo ese contexto y desde el punto de vista relativo, los flujos perfectamente podrían privilegiar aquellos mercados que, estando bajo su promedio histórico, tienen mejores perspectivas que un mercado que depende de una reforma al sistema de pensiones que le permita reducir su déficit fiscal (deuda pública con respecto del PIB subió en los últimos 5 años de un 54% a un 75% y una proyección para el 2020 de un 82% y un déficit fiscal del 7,8 con respecto de un 2,3% de hace cinco años).
En este sentido, las predicciones sobre los efectos del nuevo gobierno en la economía brasileña y las inversiones en ese país se deberían tomar con mayor cautela.