El viernes pasado entraron en vigencia los aranceles impuestos por Estados Unidos a bienes provenientes de China. Este fue el primer tiro que desató la guerra comercial que hasta ahora había estado marcada por medidas unilaterales de parte de Donald Trump a sus socios comerciales.
Y tal como había adelantado, el gigante asiático reaccionó de inmediato y no tardó más de un minuto en aplicar también aranceles en forma de represalia a lo impuesto por la primera economía mundial.
Los aranceles impuestos por Trump fueron de 25% sobre máquinas y productos electrónicos chinos por hasta US$ 34 mil millones, y la respuesta de china será equivalente.
Además, la guerra comercial se continúa expandiendo. Rusia se sumó ayer a la contienda aplicando aranceles entre el 25% y 40% a las importaciones de determinados productos provenientes de EE.UU.
Impacto en el precio del cobre
Donde sí han tenido impacto las medidas ha sido en los commodities. El cobre, por ejemplo, acumula 10 días con bajas que suman un pérdida de 7,12%. El viernes pasado cerró con una caída de 1,15% hasta US$ 2,87 por libra, su mínimo valor desde agosto de 2017.
La inquietud que surge, según economistas expertos, es cuánto más podría descender. Si bien esto es una incertidumbre, expertos señalan que el presupuesto fiscal fue hecho con un valor del cobre de US $2,77 la libra, más bajo que el promedio que acumula en el año que está en US $3,13 la libra pese a la reciente caída. Por lo tanto, en este sentido hay un margen que genera tranquilidad. Por otro lado, analistas señalan que las perspectivas de mercado a mediano plazo son muy favorables, por lo tanto, si la situación no se agrava, el precio debería comenzar a estabilizarse.