Proyección del aumento al tope imponible 2025

El tope imponible, un elemento clave en el sistema previsional chileno, será reajustado en 2025 conforme a las variaciones del Índice Real de Remuneraciones (IRR), tal como establece la Ley 20.255 de 2008 y su modificación al artículo 16 del DL 3.500. Este reajuste anual considera los cambios del IRR determinados por el Instituto Nacional de Estadísticas (INE) entre noviembre de los dos años previos.

En este contexto, nuestras estimaciones iniciales proyectan un tope imponible de 86 UF para AFP y salud y de 129,1 UF para el Seguro de Cesantía, basándonos en un crecimiento del 2% del IRR. Sin embargo, el informe del INE de agosto de 2024 reporta una variación acumulada del IRR de 2,2% a esa fecha, con un interanual del 3,8%. De mantenerse esta tendencia, el IRR podría cerrar el año entre un 2,5% y 2,7%, lo que ajustaría el tope imponible de 2025 a rangos de 86,4 UF a 86,5 UF para AFP y salud, y de 129,8 UF a 130 UF para el Seguro de Cesantía.

Impacto del ajuste al tope imponible

Este incremento continúa el proceso iniciado en 2010, cuando los topes comenzaran a actualizarse tras casi tres décadas de congelamiento. Este ajuste conecta las cotizaciones previsionales con la realidad de los ingresos, permitiendo que quienes tienen rentas más altas aporten proporcionalmente más, mejorando sus futuras pensiones. Sin embargo, aún persisten desafíos. La tasa obligatoria de cotización del 10% no es suficiente frente al aumento en la expectativa de vida y la brecha entre rentas reales y el tope imponible.

Por ello, enfatizamos la importancia de complementar el ahorro obligatorio con Ahorro Previsional Voluntario (APV), aprovechando los beneficios estatales y tributarios disponibles. Este mecanismo no solo fortalece las pensiones, sino que también contribuye a alcanzar mejores tasas de reemplazo.

Este material fue preparado para Diario Financiero y puedes leer la noticia a continuación: