A la hora de optar por una modalidad de pensión es necesario analizar todos los factores que influyen en esta elección, ya que para muchos la jubilación será el principal ingreso mensual luego de su retiro laboral.
Aunque las tasas y vectores para el cálculo de las modalidades de pensión han ido a la baja, lo importante es no precipitarse ni tomar decisiones sin un análisis exhaustivo de su situación particular y estudiar cada caso de forma independiente.
No obstante, durante los primeros cinco meses del año, los chilenos se han inclinado en mayor medida por el retiro programado, pues a mayo las pensiones suscritas bajo esa modalidad suman 8.509 (jubilación de vejez por edad y anticipada, invalidez total y parcial y sobrevivencia), mientras que por renta vitalicia inmediata el total llega a 4.616.
Además, al analizar las cifras de la Superintendencia de Pensiones, se observa que el monto promedio de las pensiones pagadas es de 7,97 UF, unos $222 mil mensuales.
Por modalidad, no obstante, el monto varía, ya que por retiro programado la media alcanza a 4,93 UF, cerca de $137.500, las que fueron concedidas en su mayoría por vejez, seguidas de viudez. En cuanto a la renta vitalicia, las pensiones pagadas al 31de mayo alcanzan a 10,41 UF, unos $290 mil, y la por renta temporal, un valor promedio de 22,14 UF o unos $617.500.
La recomendación: Esperar
La primera recomendación que entregamos a todas las personas es, que si están llegando a la edad legal de jubilación, consideren muy bien su situación patrimonial y composición de su grupo familiar antes de tomar cualquier decisión.
Las modalidades de pensión deben ser escogidas en función de las condiciones de salud del afiliado, de si seguirá trabajando y percibiendo ingresos, de si tiene aportes complementarios a su pensión, como ahorros voluntarios o depósitos convenidos y también, proyectar la posibilidad de que puedan mejorar las condiciones económicas para obtener una mejor pensión al postergar la edad legal del retiro.
A estas variables debemos sumar la situación económica mundial y local.
¿A qué se debe la inclinación hacia el retiro programado?
Si no es posible postergar la jubilación y se debe optar por alguna modalidad, debemos tener en cuenta la tasa de interés y los vectores que se utilizan para el cálculo de la pensión, variables clave al momento de tomar una decisión por optar por una u otra modalidad. En este punto podría estar la explicación de por qué los chilenos se han inclinado más hacia la modalidad de retiro programado en el último tiempo.
Actualmente, las tasas con las que se calculan los retiros programados están en un 2.95%, levemente inferior a las del periodo pasado.
Lo mismo pasa con las tasas de las rentas vitalicias que han ido decreciendo a un 2.69%.
La lógica es que a menor tasa, menor pensión se obtendrá y por ello, es muy importante contar con la recomendación de un Asesor Previsional acreditado por la Superintendencia de Pensiones para que pueda estudiar su situación particular y determinar si es un buen momento para optar por una pensión.
Asimismo, hay veces en que independientemente de que las variables indiquen que lo mejor es esperar hay personas que no tienen otra opción, y en ese caso, estas variables toman poco peso en su balanza para tomar una decisión como esta.
La decisión de optar por una pensión dependerá de las necesidades de la persona, y eso es lo más importante. Por lo tanto, la recomendación es relativa a las necesidades económicas, situación personal de longevidad, aversión al riesgo, y disponibilidad de postergar su edad de jubilación.
Respecto a las modalidades de pensión, si la persona prefiere tranquilidad y estabilidad futura puede ser una renta vitalicia con las opciones y modalidades, simple, período garantizado, etc. Si prefiere ser propietario de sus fondos y generar herencia, puede ser el retiro programado. Incluso puede mantener una opción por un tiempo y luego contratar una renta vitalicia.