Dos meses quedan para septiembre, fecha que se puso el Gobierno para presentar la reforma al sistema previsional.
A la espera de conocer los detalles del proyecto, según el estudio de opinión pública “Percepciones sobre las AFP”, realizado por Cadem y encargada por la Asociación de AFP a fines de junio, un 56% de los consultados está de acuerdo con el proyecto que hasta ahora ha delineado el Gobierno, mientras que un 41% está en desacuerdo.
Estas cifras cambiaron respecto del año pasado, ya que en octubre de 2017 solo un 22% estaba de acuerdo con el proyecto presentado por la administración de Bachelet.
Dentro de los puntos que sí estarían definidos sobre la futura reforma, además del incremento del Pilar Solidario en un 42% con cargo fiscal, está el aumento de un 4% a las cotizaciones con cargo al empleador.
Pero, ¿dónde se debe destinar la cotización adicional?
Sobre este último, una de las alternativas que estaría barajando el Ejecutivo es que una parte de esos cuatro puntos se destine al seguro de dependencia, que permitiría a los pensionados en condición de dependencia física de terceros contar con un apoyo adicional al de su pensión. Así, se beneficiaría a los actuales jubilados.
Sin embargo, según la encuesta, el 73% de los consultados considera que la totalidad de la mayor cotización previsional debe ir a las cuentas personales, mientras que un 35% cree que deberían ir a un fondo común.