Sin oferentes. Así terminó el último proceso de licitación de nuevos afiliados de la Superintendencia de Pensiones. Como nadie propuso administrar a los nuevos integrantes del sistema previsional se dejó sin efecto la licitación de la cartera. ¿Qué pasó? la industria empezó a moverse.
PlanVital anunció a finales de enero que subía en 183% su comisión por administración de cuentas obligatorias, y desde el 0,41% con que ganó la última licitación pasó a 1,16%.
De manera automática, y sin licitación, AFP Modelo, se comenzó a quedar, desde el 1 de agosto, con los nuevos afiliados.
Eso sí, la jugada de PlanVital fue magistral. Antes de la primera licitación que ganó en 2014 sumaba 384.778 afiliados, mientras que a julio de este año, y luego de cuatro años de recibir a todos los nuevos afiliados del sistema, su cartera se abultó hasta los 1.805.466 clientes: un alza de 369%. Asimismo, como la inercia entre los afiliados aún es importante en el sistema, probablemente una gran masa de ahorrantes no se cambiará de AFP.
Preparando una nueva licitación
Hasta hoy, la Superintendencia de Pensiones no ha dado luces de hacer un nuevo llamado. Ante las dudas de la industria y hasta la irrupción de una nueva AFP (UNO AFP), la superintendencia ha guardado silencio.
La razón: se estaría elaborando un proyecto de ley para realizar varios cambios al modelo de licitación, el que podría presentarse dentro de la reforma al sistema de pensiones que trabaja el Ejecutivo y que se conocería en las próximas semanas; o en una fecha posterior muy cercana, revelan quienes han conocido detalles.
¿Cuáles serían los cambios?
Por una parte, el tiempo a licitar sería de 3 años, porque 2 años sería un lapso muy acotado para que un actor pueda llevar a cabo el plan de negocios que propone cuando participa en la licitación. Por otro lado, los criterios de evaluación para ser adjudicada. Aquí los ponderadores para ganar el proceso se modificarán.
Ya no será la comisión más baja el factor más importante, sino que se incluirán puntajes especiales por la ubicación de las sucursales, los servicios digitales y remotos que entregue la AFP, y todos los servicios que ofrezca al usuario adicionales a la correcta gestión de sus fondos previsionales.
Otra de las opciones que se baraja incluir en la próxima modificación al sistema de licitaciones de cartera tiene que ver con dejar establecido una especie de “rentabilidad mínima asegurada”.
Esta se calcularía dependiendo del promedio de la industria para determinados fondos.
Es decir, si toda la industria logró rentar 3% en un mes en el fondo A, la ganadora de la licitación tiene que acercarse a ese umbral.