Para la administración liderada por Sebastián Piñera, la Reforma Previsional es una de sus prioridades, y mejorar las pensiones uno de sus principales desafíos.
Ahora que acaba de asumir la presidencia formalmente, se espera que lleve al congreso su propuesta, la cual se puede resumir en cinco puntos clave:
- Elevar en cuatro puntos la tasa de cotización con cargo al empleador y que vaya íntegra a las cuentas individuales de los trabajadores.
- Plantea incrementar el aporte fiscal al Pilar Solidario, que hoy es de 0,8 puntos del PIB, a 1,14. Con ello, busca aumentar tanto la Pensión Básica Solidaria (PBS) como el Aporte Previsional Solidario (APS). Para hacerlo, propone una fórmula por medio de la cual a mayor tramo de edad, más alto será el aumento en las jubilaciones solidarias.
- Plantea complementar las pensiones de vejez de la clase media en el sistema de ahorro individual para quienes hayan cotizado más de 20 años en el caso de los hombres y más de 16 años en las mujeres.
- Entregaría incentivos a quienes posterguen voluntariamente su edad de jubilación legal. Así, los hombres que se pensionen a los 66 años o más o mujeres que jubilen a partir de los 61 años podrán retirar un monto de libre disposición, equivalente al 50% del mayor ahorro generado por esta medida.
- Aumentaría la competencia en la industria, facilitando el ingreso de nuevos actores como cajas de compensación y compañías de seguros. Además, evaluaría crear una AFP estatal.