Esta semana, la renta variable internacional mostró un desempeño mixto, con leves caídas en el S&P 500 y el NASDAQ, en medio de menores expectativas de crecimiento de utilidades. En tanto, la renta fija se ha beneficiado de la baja en la tasa de interés del bono del Tesoro a 10 años en EE.UU., mientras que el tipo de cambio sigue fluctuando en un rango clave. A continuación, analizamos los factores que están marcando el panorama financiero y las oportunidades que podrían surgir.
¿Qué está pasando en los mercados?
Renta Variable: Valorizaciones y Perspectivas
Los principales índices de EE.UU. experimentaron leves retrocesos, en parte por expectativas de crecimiento de utilidades que, si bien siguen siendo elevadas, han mostrado señales de ajuste. Actualmente, el S&P 500 cotiza a un múltiplo de valorización de 22,6x considerando el crecimiento de utilidades, mientras que sin este factor, la cifra asciende a 25x, niveles elevados en comparación con su promedio histórico. En este contexto, mantenemos una visión neutral sobre la renta variable de mercados desarrollados, con un sesgo más positivo hacia los mercados emergentes, especialmente si el dólar estadounidense sigue perdiendo fuerza en el corto plazo.
Renta Fija: Beneficiada por la Caída en Tasas
El mercado de renta fija ha registrado un desempeño positivo, impulsado por la baja en la tasa del bono del Tesoro a 10 años en EE.UU., que cayó de 4,60% a 4,40%. Este movimiento podría continuar si se mantiene la tendencia a la baja en el índice del dólar (DXY), lo que nos mantiene en renta fija reajustable local con una duración que va desde 1 año a 3 años.
Tipo de Cambio: Expectativas en el USDCLP
El tipo de cambio se mantiene en un rango clave entre $935 y $965, a la espera de factores que podrían definir su tendencia a corto plazo. En particular, el índice de términos de intercambio entre el cobre y el petróleo es un factor determinante, ya que si sigue favoreciendo una apreciación del peso chileno, podríamos ver una reanudación de la tendencia bajista del USDCLP.